La redención de Dios
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· 30 viewsLa promesa de Dios de rescatar a su pueblo es firme a pesar de la severidad del castigo por su pecado.
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La redención de Dios
La redención de Dios
Isaías 43:1–3
1Ahora, así dice Jehová, Creador tuyo, oh Jacob, y Formador tuyo, oh Israel: No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú. 2Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti. 3Porque yo Jehová, Dios tuyo, el Santo de Israel, soy tu Salvador; a Egipto he dado por tu rescate, a Etiopía y a Seba por ti.
Introducción
Introducción
Los libros proféticos de Isaías y Jeremías son un llamado al pueblo de Dios al arrepentimiento y advertencia del juicio por el pecado.
Pero Israel despreció el llamado de Dios, amó el pecado y prefirió las falsas profecías que les agradaba.
Primero cayó Samaria en el año 722 a.C. en manos de Salmanasar de Asiria. Fue destruida y sus habitantes llevados cautivos.
136 años después cayó Jerusalén en el año 586 a.C. en manos de Nabucodonosor rey de Babilonia. Fue destruida y sus habitantes llevados al cautiverio.
Sin embargo, Isaias 43 es una esperanza, profetiza lo que acontecerá después de la corrección.
Contiene una promesa gloriosa de redención, en la cual, a pesar de sus pecados , Dios sigue amando a su pueblo y está dispuesto a restaurarlo.
Jeremías 25 declara que serán 70 años de cautiverio, al final de los cuales Dios los hará volver y restaurará su tierra.
Dios nuestro creador
Dios nuestro creador
Isaías 43:1 “Ahora, así dice Jehová, Creador tuyo, oh Jacob, y Formador tuyo, oh Israel: No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú.”
Así dice Jehová… es una declaración de Dios, no ha nacido en el corazón o mente de Isaías. Es el mismo Dios hablando a su pueblo.
Creador tuyo… formador tuyo…
Dios se identifica como el creador de su pueblo, hay un vinculo que une a Dios con su pueblo, Él es su creador, nos ha creado a su image y semejanza. Génesis 1:27 “Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.”
Este vinculo con Dios hace que su pueblo esté en su corazón, como un hijo en el corazón de una madre.
Así fuimos nosotros creados y escogidos por Dios… Salmo 22:9–10 (NTV) “9 Sin embargo, me sacaste a salvo del vientre de mi madre y, desde que ella me amamantaba, me hiciste confiar en ti. 10 Me arrojaron en tus brazos al nacer; desde mi nacimiento, tú has sido mi Dios.”
Yo te redimí…
El Señor rescató a su pueblo de la esclavitud de Egipto.
La redención es el pago de un rescate o una fianza para liberar a un secuestrado o encarcelado…
Sin embargo, en el caso de nuestros pecados, fuimos rescatados de la esclavitud del pecado, una condición a la que no podíamos liberarnos.
1 Pedro 1:18–19 “sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, 19sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación.”
Aunque eres de barro, tu vida en Cristo vale más que el oro y las piedras preciosas por la Sangre de Cristo.
De manera que ahora le pertenecemos al Señor POR SIEMPRE, somos posesión suya.
El nos conoce y nos ha puesto nombre. Nahúm 1:7 “Jehová es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían.”
Estas declaraciones se aplican también a nosotros:
Fuimos creados por Dios
Él nos formó
Fuimos redimidos del pecado.
Somos llamados sus hijos
Le pertenecemos a Él.
Todas estas declaraciones deben ser suficientes para eliminar la duda, la angustia, el temor y la incertidumbre de nuestras vidas. Debe hacernos aferrarnos a Él cada día más.
Protección
Protección
Isaías 43:2 “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti.”
Tanto el agua como el fuego simbolizan la tribulación o angustia que experimentará el pueblo de Dios.
Isaías lo simboliza así: Isaías 8:7–8 “he aquí, por tanto, que el Señor hace subir sobre ellos aguas de ríos, impetuosas y muchas, esto es, al rey de Asiria con todo su poder; el cual subirá sobre todos sus ríos, y pasará sobre todas sus riberas; 8y pasando hasta Judá, inundará y pasará adelante, y llegará hasta la garganta; y extendiendo sus alas, llenará la anchura de tu tierra, oh Emanuel.”
Estos ríos impetuosos representan ejércitos feroces en gran número que vendrán contra su pueblo.
Pero a pesar de la dureza del castigo, Dios promete sostenerlos y no permitir que sea destruido totalmente.
Cuando pases por el fuego no te quemarás…
Jerusalén fue literalmente incendiada. 2º Reyes 25:8–9 “En el mes quinto, a los siete días del mes, siendo el año diecinueve de Nabucodonosor rey de Babilonia, vino a Jerusalén Nabuzaradán, capitán de la guardia, siervo del rey de Babilonia. 9Y quemó la casa de Jehová, y la casa del rey, y todas las casas de Jerusalén; y todas las casas de los príncipes quemó a fuego.”
Pero el fuego simboliza la tribulación sufrida para disciplina y corrección de su pecado.
Este castigo era suficiente para hacer desaparecer a cualquier nación… Pero el pueblo de Dios superó el castigo porque Jehová Dios les había prometido guardarlos.
Dios no había terminado con su pueblo, aun habían planes para ellos, por lo tanto, serían corregidos pero guardados.
Así nosotros hemos sido escogidos por Dios para salvación. Romanos 8:1 “Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.”
Seremos castigados por nuestros pecados, por nuestras malas desiciones, pero seremos guardados en las manos de Dios. 1 Corintios 10:13 “No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.”
Como los amigos de Daniel, no fueron librados del horno de fuego pero guardados de las llamas en medio del horno. Daniel 3
Quizá estes atravesando turbulentas aguas que amenaza ahogarte, ahí está El Señor contigo…
Quizá el fuego de la angustia amenaza destruirte, ahí te está guardando el Señor…
Ten paciencia, soporta la prueba, la corrección, tú no serás destruido, no serás condenado, no serás avergonzado porque El Señor está contigo.
Nuestro Dios
Nuestro Dios
Isaías 43:3 “Porque yo Jehová, Dios tuyo, el Santo de Israel, soy tu Salvador; a Egipto he dado por tu rescate, a Etiopía y a Seba por ti.”
El Señor continúa declarando su relación con su pueblo… una relación más fuerte que cualquier relación humana.
En nuestras relaciones si alguien nos desprecia rompemos esa relación, pero a pesar de que Israel fue infiel a Dios, lo rechazó y desobedeció, Él permanece siempre fiel, por que Él es nuestro Dios el Santo de Israel.
Se identifica como nuestro salvador…
Es importante reconocer que fuimos rescatados de una condición lamentable de pecado, insatisfacción, dolor, tristeza y lamento.
Es importante reconocer que Dios es nuestro Salvador…
Él no nos debe nada a nosotros pero nosotros le debemos todo.
Que más podemos pedirle si Él ha dado todo por nosotros. Debemos estás dispuestos a ofrecerle lo poco que tenemos.
Entre los pueblo de la tierra, más grandes, más avanzados, más intelectuales, con mayores riquezas, ha preferido escoger a su pueblo por amor.
Deuteronomio 7:6–7 “6Porque tú eres pueblo santo para Jehová tu Dios; Jehová tu Dios te ha escogido para serle un pueblo especial, más que todos los pueblos que están sobre la tierra. 7No por ser vosotros más que todos los pueblos os ha querido Jehová y os ha escogido, pues vosotros erais el más insignificante de todos los pueblos;”
Conclusión
Conclusión
Dios nos escogió y nos salvó cuando nosotros no lo merecíamos, no somos los mejores, sino por su misericordia… 1 Pedro 2:10 “vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia.”
Somos testarudos, infieles, quejumbrosos y desobedientes, aun así Dios nos tiene paciencia, nos sigue amando y está dispuesto a recibirnos.
Cometemos errores por los cuales somos castigados porque somos hijos, pero aún así Dios no nos rechaza ni nos desprecia. 2 Pedro 3:9 “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.”
A pesar de nuestra infidelidad Él permanece fiel
2 Timoteo 2:13 “Si fuéremos infieles, él permanece fiel; El no puede negarse a sí mismo.”
Como Padre Dios nos castigará por nuestro pecado, pero no nos desechará, la corrección no nos destruirá, Él nos protege y nos sostiene para que salgamos en victoria, con madurez y sabiduría para corregir nuestros errores.
Isaías 43:2–3 “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti. Porque yo Jehová, Dios tuyo, el Santo de Israel, soy tu Salvador…”
