La paciencia de Dios es para salvación
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· 6 viewsLa segunda venida de Cristo es un tema importante para el cristiano, que nos recuerda velar y estar firmes.
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La paciencia de Dios es para salvación
La paciencia de Dios es para salvación
2 Pedro 3:7–10 (RVR60)
7pero los cielos y la tierra que existen ahora, están reservados por la misma palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de los hombres impíos. 8Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. 9El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento. 10Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas.
Introducción
Introducción
El apóstol Pedro aborda el tema de la venida del Señor y el día final, señalando que aunque parece que Dios demora su promesa, su paciencia es para salvación.
Nos recuerda que el mundo actual será consumido por fuego, haciendo hincapié en la certeza de su inminente regreso.
Este pasaje nos recuerda que, aunque enfrentemos dudas y desafíos en nuestra vida cotidiana, la promesa del regreso de Cristo es un firme fundamento sobre el cual podemos edificar nuestra fe.
Nos llama a vivir con una fe firme, velando y no desanimarnos, recordando que la paciencia de Dios es por amor a nosotros y a los que aún no le conocen.
La contaminación del pecado
La contaminación del pecado
2 Peter 3:7 “pero los cielos y la tierra que existen ahora, están reservados por la misma palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de los hombres impíos.”
La tierra está sumamente contaminada de pecado y es evidente en la degradación, contaminación ambiental y desastres naturales.
En la Biblia el fuego es usado para purificación al igual que el agua.
El fuego purifica destruyendo totalmente con el propósito de edificar nuevamente.
El agua purifica eliminando la suciedad, pero preservando el elemento purificado.
En Génesis 6 Dios toma la decisión de purificar la tierra con agua por la contaminación del pecado. Los seres vivos murieron pero la tierra fue preservada.
La tierra sufrirá un segundo proceso de purificación, pero esta vez con fuego. La tierra será destruida totalmente con el propósito de crear cielos nuevos y tierra nueva donde habitaremos los redimidos con la sangre de Cristo.
Apocalipsis 21:1 “Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más.” Apocalipsis 21:4 “Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron.”
El juicio está detallado en Apocalipsis, pero mientras esto sucede, la iglesia habrá sido arrebatada previamente para disfrutar de las bodas del cordero. Apocalipsis 19:7 “Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado.”
Es necesario que sea purificada con fuego pues hay personas que teniendo la oportunidad de limpiar su alma de pecado con la sangre de Cristo, prefieren seguir en pecado.
Los juicios vendrán sobre la tierra con terremotos, desastres, inundación, lluvia de fuego, pero esta verdad no debería provocar miedo en los escogidos para salvación, sino gozo y esperanza.
Para los que no han afirmado sus vidas debe ser una advertencia y una invitación a aceptar la salvación de Cristo.
El tiempo de Dios
El tiempo de Dios
2 Pedro 3:8 “Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día.”
El apóstol Pedro confronta un problema que aun es evidente en algunos cristianos.
Se desanimaban por la tardanza de la venida del Señor.
Pedro nos insta a no desesperar ante un aparente retraso en el regreso de Cristo.
Declara que un día para Dios es como mil años.
Dios no está sujeto al tiempo, Él es eterno lo que significa que no está sujeto al tiempo (eternidad no es una gran cantidad de tiempo sino la ausencia del mismo). De manera que un día para el es igual a mil o diez mil años.
Adelantarse o retrasarse no existe para Dios, pues Él siempre está presente en todo momento.
Es a nosotros que nos afecta el tiempo, por eso desesperamos.
Esto debería animarte a ver cada día como una oportunidad de salvación y afirmar tu corazón para Su futuro regreso.
El hombre siempre ha querido encajar la venida del Señor con eventos en el tiempo de este mundo. Por tanto, se ha empeñado en adivinar la fecha. Mateo 24:36 “Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino sólo mi Padre.”
Los testigos de Jehová cinco veces han tratado de profetiza la venida de Cristo: 1878, 1881, 1914, 1825 y en 1975 profetizaron el armagedón.
Muchos otros lo han intentado pero han fallado. En el año 1000 o en el 2000.
No podemos limitar el propósito de Dios al tiempo humano (Kronos) pues Dios no está afecto al tiempo. Su propósito se cumple en el Kairós, el momento oportuno de Dios.
Por eso Pedro declara que para Dios 1 día es como 1000 años.
Esto no es literal, lo que Pedro dice es que Dios no rige sus planes en el tiempo pues Él es eterno.
Para Dios es lo mismo un día como mil años pues habita en la eternidad, está en el presente, pasado y futuro.
Promesas Cumplidas con Paciencia
Promesas Cumplidas con Paciencia
2 Peter 3:9 “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.”
Este versículo es una reafirmación de que Dios no es lento, sino que es misericordioso, un Dios de promesas cumplidas.
Su paciencia es una parte central de Su plan para nuestra salvación y para el mundo.
Dios tiene un momento estipulado en el que cumplirá su promesa de ejecutar juicio sobre la tierra y salvar a los escogidos.
Pero mientras eso sucede, Dios demuestra su paciencia ante la rebeldía e irrespeto del mundo ante su majestad.
La paciencia de Dios no ha sido colmada aun, Él esta dispuesto a perdonar los pecados de aquellos que se acercan a Él arrepentidos, pues es misericordioso. Santiago 4:8 “Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.”
Dios está dando oportunidad pues su deseo es que todos sean salvos: 1 Timoteo 2:4 “el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad.”
Con toda la ofensa que la humanidad ha cometido contra Dios, ya habríamos perecido todos. Lamentaciones 3:22 “Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias.”
Pero llegará el día en que ya no habrá más oportunidad.
Algunos se relajan porque creen que falta cientos de años para que el Señor venga, no consideran que no vivirán ese tiempo, la muerte llegará y tendrán que dar cuentas. Hebreos 9:27 “Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio”
Lucas 12:20 “Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será?”
Conclusión
Conclusión
2 Peter 3:10 “Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas.”
Puede que el Señor tarde cientos de años en venir o puede que venga hoy, nadie lo sabe.
El Señor vendrá inesperadamente como ladrón en la noche. Cuando venga traerá consigo el juicio contra la tierra y ya nadie podrá escapar.
1 Tesalonicenses 4:16 “Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.”
Por tanto, es necesario estar preparados, constantes en el evangelio.
1 Tesalonicenses 5:6 “Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios.”
Como en los días de Noé, estaban entretenidos con sus afanes cuando vino el diluvio. Mateo 24:37–39 “Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre. Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del Hijo del Hombre.”
Ahora es tiempo de afirmarse: Isaías 55:6 “Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano.”
Este conocimiento debería motivarte a vivir con urgencia espiritual, dedicando tu vida a lo que verdaderamente importa y con un corazón preparado para Su llegada. Examina cómo puedes vivir con esta certeza diariamente.
